Historia de unos videos nominados a los VMAs

Las dos historias provienen de muy muy lejos, la primera llega desde Nueva Zelandia:

Resulta que en las oficinas del gran director de videos francés Michael Gondry, una chica que trabaja ahí haciendo sabe Dios qué, de alguna manera había oído de la banda neozelandesa Steriogram y se había comprado un disco, el cual oía sin descanso todo el día.

Un día, el aclamado director pasó por la oficina de la chica y le gustó lo que escuchaba, le pidió prestado el disco y se enamoró de la canción Walkie Talkie Man. A los pocos días, Gondry pudo contactar a la banda y les propuso hacerles el video.

Para una banda nueva como lo es Steriogram (y más aún en aquel momento), que uno de los mejores directores de videos del mundo se ofrezca a hacerle un video tiene las mismas probabilidades de ser secuestrado por una nave espacial procedente de Gamínides.

El resultado es que ahora Steriogram se ha ubicado en el mapa mundial gracias al video realizado por Gondry y este Domingo competirá en cuatro categorías distintas que son Mejores Efectos Especiales, Mejor Dirección, Mejor Dirección Artística y Video Revelación.

La otra historia viene también de por allá, Australia:

Dicen que hacer videos es una juerga … casi siempre. Por lo menos no lo fue para Mark Wilson, el bajista de la banda australiana Jet, quien tuvo un pequeño incidente en la grabación de su video nominado a los MTV VMAS 2004 “Are You Gonna Be My Girl”.

Resulta que durante la grabación del video, Wilson tenía una inmensa torre de luces enfocando directamente hacia él, la luz le pegaba en la cabeza, y, luego de unas horas de grabación, se desmayó y la grabación tuvo que ser suspendida.

Al resto de la banda le cayó muy bien el receso y, mientras Wilson descansaba después de ser atendido, aprovecharon para beber toda la cerveza que pudieron.

Wilson dice que su colapso se debió a una tremenda deshidratación ya que en todo momento llevaba puesta una pesada chaqueta militar y no podía sacársela para que le video no perdiera continuidad.

Después de unas horas de descanso, el bajista ya recuperado volvió al rodaje y los pobres chicos del resto de la banda tuvieron que dejar las cervezas a un lado.

El video terminó siendo un éxito y este domingo compiten por el moonman en las categorías de Mejor Edición y Mejor Video de Rock. No se lo pueden perder.